Hermano, hermano mío
te voy a contar un cuento
como hacía cuando el sueño
en aquellas noches largas,
con un soplo aterrador
escapaba de tu cama
y poco a poco volvía
moviendo sus dulces alas.
Había un joven guerrero
que a defenderse aprendió
de los agresores fieros,
pero el destino cruel
como agujas en la piel
le clavo su fina daga,
el desgarro de una muerte,
una muerte inesperada.
El amor llega de lejos,
su corazón le regala
no le importa su pasado
con el futuro le basta,
trabajando sin descanso
un castillo le construye
y lo convierte en morada.
Pero hay oscuras tormentas
que su corazón amargan.
Su querido amigo fiel
a otras tierras se marcha,
dejando una triste pena
creciendo sobre su alma.
Nuevas nubes aparecen
no cesa la dura batalla
como guerrero que es
vuelve a empuñar su espada.
Su estirpe es de las fuertes
de roja sangre y espada
su escudo es la verdad
su honradez le salva.
Dedicado a mi hermano Leonardo
Enero 2018